sábado, 12 de marzo de 2016

caravaggio y toledo

Caravaggio (Milán 1571-1610)
San Juan Bautista (Catedral de Toledo-1598)

La Catedral de Toledo es sinónimo de sobredosis de arte. Monumental y llena de rincones, su visita con audio guía parece quedarse corta y larga a la vez. Se empieza en 1226 y se acaba en 1493. No abundan los detalles, quizás en aras del interés general. El transparente, obra escultórica de Narciso Tomé, destaca por su belleza,  es considerada como la obra cumbre del barroco español y se realiza entre 1729 y 1732. Después de recorrer naves y capillas y de pisar lápidas y suelos desgastados la culminación llega con la sacristía. Acumulación de cuadros en las paredes, y a los numerosos Grecos, que gana por mayoría, acompañan obras de Luis de Morales, apodado el divino, de Luis Tristán, Goya, Rafael o el maravilloso San Juan de Bautista, de Caravaggio, donde las sombras dicen tanto como las luces. Una vez afuera, el calor se acumula al cansancio y apetece descansar, y comer, en gruta horadada en la tierra, con la piedra vista, con poca luz, y degustar las viandas, que acompañan el reposo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario